Se trata de un edificio de 1959, cuyo uso fundamental es una residencia de estudiantes brasileños en Madrid y que, sin lugar a dudas, se pueden observar referencias claras tanto a las residencias proyectadas por Le Corbusier como a la obra de Óscar Niemeyer y Lucio Costa en referencia a su país natal.
No voy a entrar en un análisis pormenorizado de la arquitectura, que daría para bastante, pero sí quiero señalar la sensibilidad entre las fachadas y su entorno. Por un lado, las fachadas con orientación noreste, que se refieren a la avenida de gran tráfico, presentan un hermetismo silencioso que además crean una imagen monolítica de gran escala, un icono que responde a la negación del bullicio exterior.
Y por el otro lado, las aberturas al suroeste se corresponden con las ventanas de las habitaciones totalmente acristaladas por módulos, volcándose a un espacio más natural e íntimo. Destaca la elevada presencia de aparatos de aire acondicionado en la fachada (parece que se les olvidaron los "brise-soleil").
Subo el apunte "original" sólo a tinta y otro con adición de color digital.
Un buen edificio para aprender arquitectura moderna y, en consecuencia, bastante frecuentado por alumnos de la escuela de arquitectura de Madrid.
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